viernes, 29 de enero de 2010

Piñera anuncia entrega de “Bono Auge” a quienes denuncien mala atención en la salud pública

Piñera anuncia entrega de “Bono Auge” a quienes denuncien mala atención en la salud pública
Publicado por Denisse Charpentier •

El candidato presidencial de la Coalición por el Cambio, Sebastián Piñera, anunció que en su eventual Gobierno entregará un “Bono Auge”, beneficio que pretende ser un paliativo a la atención en los recintos públicos, ya que se dará al paciente que denuncie deficiencias.

El informe es de Andrea Gómez de Radio Bío-Bío Santiago


A través de este “Bono Auge”, que tiene un costo de 75 millones de dólares, el abanderado de la Alianza pretende en un plazo de 18 meses, terminar con las listas de espera de atención por enfermedades que cubre el plan Auge.

El abanderado de la Alianza realizó un recorrido por el Hospital del Trabajador, donde expuso su propuesta en materia de salud de su eventual gobierno y enfatizó que el sistema actual está en crisis.

Confusam teme "privatización encubierta" de la salud pública

Confusam teme "privatización encubierta" de la salud pública

En el próximo gobierno de Sebastián Piñera.


ORBE- A raíz de la victoria del abanderado de la Coalición por el Cambio, Sebastián Piñera, el presidente de la Confederación Nacional de Funcionarios de Salud Muncipalizada (Confusam), Juan Muñoz, aseguró que los trabajadores de los centros asistenciales "no tienen miedo a perder sus trabajos", no obstante, les preocupa lo que denominan "la privatización encubierta" que según el gremio pretende efectuar el presidente electo.

Asimismo, el timonel afirmó que "no somos trabajadores del sector público, nuestro empleadores son los municipios. Mirado desde esa perspectiva no tenemos miedo a perder nuestros trabajos".

No obstante, el líder de la Confusam ve "con preocupación" las declaraciones del futuro mandatario, ya que "Piñera, para solucionar el tema del sector público, promete un Bono-Auge a aquellos que no se les cumplan las garantías y eso, en el fondo, es una privatización encubierta".

Según el dirigente, el mencionado bono "serviría para que los empresarios una vez mas se hagan ricos a costa de los pobres" y que "se rompería la promesa del Ministerio de que no se iban a privatizar consultorios".

Finalmente, Muñoz sostuvo que "ante lo que pueda surgir, el gremio lo enfrentará con la unidad de siempre"

PREDICCIONES DE SALUD 2010

Llega fin de año y todos hacen resúmenes. Pues bien, siguiendo la contraria les dejo mi pequeña lista de deseos 2010 para la medicina.

Mi primer deseo es que quien asuma como Presidente en marzo de 2010, ponga en el Ministerio de Salud a alguien que realmente se la juegue por la Salud Pública, que sepa como administrar ese elefante blanco que tiene tan malos estándares de atención si lo comparamos con la salud privada. Quizás sería bueno que dejen de lado a los médicos y se la jueguen por otro profesional de la salud como Ministro(a), ya que los médicos no saben nada de administración han tenido muchas oportunidades en este cargo.

Mi segundo deseo es que el invierno nos pille bien preparados. No sea que la Gripe Porcina vuelva a ser la enfermedad top y nosotros no tengamos un plan para atender la gran demanda de consultas por esta enfermedad. Veremos cuanta cobertura le darán los canales de TV y la prensa escrita, si en esa fecha justó Chile estará jugando el Mundial de Fútbol (y más de alguno tendrá la “excusa” de la Gripe para quedarse en casa viendo los partidos).

Otro tema que se viene en el 2010 será la autogestión de los hospitales públicos. De antemano podemos decir que va a quedar la cagá no va a resultar, principalmente porque la estructura actual de los hospitales públicos, con grandes deudas y mala gestión, no es la mejor para implementar un tema como este. Esperemos que no sea el Transantiago de nuestro sector.

Mis dotes de chanta adivino me dicen que también deberiamos seguir viendo que más enfermedades se unen al Plan Auge (así como reclamos por la demora en los tiempos de atención del plan), tendremos más casos de personas que esperan con urgencia un trasplante de organos que no llega, veremos como los medios suben su rating mostrando casos humanos de “negligencias médicas”, la llegada de la vacuna contra el Virus de la Gripe Porcina, etc, etc.

Así que desde esta humilde tribuna los invito a hacer sus propias predicciones médicas para el 2010. Como sabe si le achunta?.

http://www.matasanos.org

LAS PROPUESTAS DE SALUD DE PIÑERA ¿A QUIEN BENEFICIARAN???

Siguiendo con la serie de Propuestas en Salud de los Candidatos Presidenciales, el día de hoy queremos revisar las propuestas del candidato por la Coalición del Cambio Sebastián Piñera. Expondré en este articulo las principales medidas que aparecen como Programa de Gobierno – Salud en el sitio web, donde según se explica es el resultado del trabajo realizado por la comisión salud del Grupo Tantauco, liderada por Vito Scaraffia. Al final, realizaré un comentario de estas medidas de manera estrictamente personal.

“El objetivo es entregar a los chilenos una atención de salud oportuna, eficaz, con trato digno y condiciones económicas razonables. Las políticas principales para lograrla descansan en cinco ejes.”

Realizar una mejora sustancial de la infraestructura. Para ello se iniciará la construcción de 10 hospitales y 76 consultorios, utilizando el sistema de concesiones. Además, se invertirá como mínimo US$620 millones para recuperar, modernizar y ampliar más de 50 hospitales y 200 consultorios que actualmente lo requieren, dándole prioridad a la dotación de médicos especialistas, disponibilidad de remedios, la inversión en equipamiento y ambulancias, para fortalecer su capacidad resolutiva.
Realizar una gestión moderna en salud. Para ello al año 2014 habrá como mínimo 45 hospitales en categoría de autogestionados. Además, modificaremos el gobierno corporativo de todos los hospitales, permitiéndoles un mayor grado de autonomía y mejores remuneraciones en relación a la calidad de la atención.
Mejorar la calidad de la atención en salud. Al respecto la prioridad es eliminar las listas de espera en todas las enfermedades Auge, impulsando una alianza entre el Sistema Público y Privado creando el «Bono de Garantía Auge», que asegure a las personas más vulnerables una atención oportuna en instituciones de salud, tanto públicas como privadas de su elección.
El Sistema de Atención Primaria de Salud mejorará su atención a través de un conjunto de reformas profundas, entre las cuales destaca: aumento de la capacidad de resolución, incremento del per cápita de salud, aumento de los horarios de atención, incorporación de médicos especialistas, becas de capacitación para sus funcionarios e incentivos para retener a los mejores profesionales.
La buena atención de los usuarios se fomentará a través de la firma con cada uno de los establecimientos de salud de contratos de prestación de servicios con metas concretas, con información pública de sus resultados y con estándares para medirlos.
Comentario

Pese a que el website es bastante recargado en información, esta es principalmente de prensa. Descargue el capitulo completo del programa: Hacia una sociedad de seguridades, pero respecto a salud no aparece mucho más allá de lo publicado aquí, excepto por la introducción.

No obstante a aquello, debo decir que las propuestas en general son interesantes, pero a la vez bastante genericas, aunque en algunas se esbozan ideas o conceptos mas representativos de la candidatura. Si bien por razones obvias no se encuentran en este espacio mayores detalles, los titulares parecen los adecuados, vamos uno por uno.

Infraestructura: Mas allá del numero de hospitales nuevos o los millones invertidos, lo mas destacable aquí es la definición de seguir la ruta de concesiones hospitalarias, que en varios países e incluso en Chile (se acaban de firmar cuatro convenios para los próximos años, además de los ya avanzados Maipú y La Florida) ha demostrado ser una alternativa interesante como alianza publico privada en torno a la construcción y administración de servicios básicos hospitalarios, liberando al estado de un rol para el cual no fue diseñado ni logra la mayor eficiencia. Los gobiernos de la Concertación fueron tímidos a la hora definir esta política (Caso Complejo Salvador Infante años atrás) pero ahora a logrado un nuevo impulso.

Gestión Moderna: En varios pasajes del video que esta publicado donde habla Vito Scaraffia (Director del IAS UCh) se habla de incorporar tecnologías de información al sector público, donde incluso promete ficha electrónica en todo el SNSS. Ambicioso, pero es una medida absolutamente necesaria e importante. La inversión en tecnología seria una estrategia muy potente tanto en aumentar la performance del AUGE, el mejoramiento de la calidad de atención, la satisfacción laboral y la reducción de costos del sistema.

Gobierno Corporativo / Autonomía Hospitalaria: Con una ley de la Reforma inconclusa, Autogestión Hospitalaria, como se pretende abordar este punto? Nada se describe sobre el largo y tortuoso camino de los hospitales en su lucha por cumplir los estándares de autogestión que no precisamente significa que sean independientes, de la forma en que esta escrita la ley ahora. Cambiar la Ley? Para lograr mayor autonomía en la gestión se requieren reformas muy importantes, además si se pretende de verdad incorporar a las entidades hospitalarias a la gestión basada en directorios (gobierno corporativo) que es como se dirigen las grandes empresas. Lo mismo con mayores remuneraciones. Que significa eso? Van a cambiar el estatuto? Los grados del sector público? Esas son reformas mayores de las cuales nada se menciona en este programa por lo menos.

Calidad de la Atención / Bono AUGE : esta es una vieja ofensiva de las ISAPRES desde que se instaló el Auge. La idea de que el paciente obtenga un bono que puede “canjear” en el sector privado para atención en salud inmediatamente se produzca un incumplimiento en la garantía de oportunidad Auge ha dado origen siempre a una intensa discusión. La transferencia al sector privado directamente y sin la intervención de FONASA y la SuperIntendencia agiliza el proceso sin duda, pero aumenta los costos del sector público paralelamente. Y porque no modernizar la operación y mejorar el cumplimiento del sector público con esos recursos? Saque usted sus propias conclusiones, pero les aseguro que las clínicas estarían felices con recibir pacientes Auge con ese cheque en blanco del estado.

APS / Reformas Profundas?: Todavía me pregunto donde están las reformas profundas de la APS ideadas por el grupo Tantauco. Las medidas genéricas expresadas son las que todos deseamos, nadie se podría oponer a un aumento de resolutividad, incremento per capita, becas e incentivos. Que pasa con la municipalización, se profundiza o se disminuye? Que pasa con el modelo de Salud Familiar? Que pasa con la incorporación de capital privado? Que pasa con la gestión de recursos humanos? Como pretenden abordar la calidad de la atención en la APS? Estoy muy de acuerdo en que el tema APS sea destacado, ya que la atención primaria representa la base de todo sistema de salud moderno y equitativo, pero no veo en este programa alguna solución innovadora o al menos “distinta” del resto, que nos permita esperar un real desarrollo de la Atención Primaria en Salud.

Contratos por Prestación de Servicios / Establecimientos: Suena interesante, pero es un punto extremadamente vago. Una vez mas, que significa realmente esto? Cambiar los mecanismos de pago hacia cada vez mas una paquetización en salud o aumentar el Pago por Prestación Valorada y disminuir las prestaciones institucionalizadas? Significa esto una nueva forma de relación del sector prestador publico en salud con el ministerio de Salud y Hacienda? Se toma en cuenta la modernización en toda la gestión del sector para llegar hacia eso? Se planean incentivos? Más dudas que respuestas aquí.

Para terminar, creo que si bien el programa aborda de alguna manera los problemas principales del sector salud, faltan detalles a la hora de entender cual es la “real” propuesta programática del candidato Piñera. Se esbozan algunos detalles, como que un eventual gobierno suyo supondría un mayor desarrollo de la complementación público privada (Concesiones-Bono Auge) y también un mejoramiento en la gestión de los establecimientos. Pero lamentablemente no se encuentra aqui una propuesta integral de modernización de como el estado gobierna el sector prestador publico en salud, tampoco se habla de cambios profundos en el financiamiento del sistema o de la operación del mismo y menos en la atención primaria.

¿Qué pasaría con la salud si Piñera fuera Presidente?

¿Qué pasaría con la salud si Piñera fuera Presidente?

(YA ES PRESIDENTE QUE VA A PASAR AHORA )

La propuesta de Piñera es un negocio. No mejora los niveles de salud. Al contrario, amenaza con empeorarlos. Sólo mejora los ingresos de los empresarios de las aseguradoras, las isapres, los megacentros de salud.



La Nación

Hernán Monasterio, Médico siquiatra y salubrista

El equipo de Sebastián Piñera propone un plan mínimo garantizado óptimo, que explicitaría sólo algunas atenciones. ¿Cuántas? No se sabe, sólo se dice que es mínimo, en abierta contradicción con lo planteado por Michelle Bachelet, que delineó un proyecto de garantías crecientes en su programa de salud. Para financiarlo eliminaría 7% de cotización y otorgaría un aporte fiscal de modo de asegurar que todos tengan el plan básico. Los ricos ¿pagarían el plan básico de su propio bolsillo o será el fisco? Si se elimina la cotización, los más pobres y la clase media sólo podrían recibir planes mínimos, mientras los ricos tendrían posibilidad de acceder a otros más caros y completos.

Es una propuesta engañosa la de Piñera, porque para hacerla más digerible se plantean críticas a la labor realizada por las isapres como guardianas de 7% del sector privado. Pero no se plantea nada más que un cambio de giro en el negocio. En vez de administrar 7% del sector privado, quieren administrar el plan básico de todos los chilenos; es decir, ampliar el mercado. Realmente, se busca que los aseguradores privados y las isapres reciban un aporte fiscal y de esa forma aumenten sus ingresos. Se pretende que el Estado pague por los más pobres un subsidio para el plan mínimo, posible de comprar en cualquier isapre. A eso le llama subsidios portables. Se quiere “portar” el subsidio fiscal hacia las ganancias de los seguros privados.

El plan de Piñera es una reforma en beneficio de las isapres y las compañías de seguros. No se concibe la salud más que como negocio. ¿Tendrá el candidato presidencial de RN inversiones en las isapres y las compañías de seguros? ¿Qué pasa con las enfermedades catastróficas? ¿Las pagaría el seguro? No, porque son muy caras y dañan el bolsillo de la compañía. Para evitarlo, se propone un fondo solidario; es decir, que todos los chilenos ayudemos a la aseguradora a pagar los costos de una enfermedad catastrófica. Ahora bien, para completar el cuadro se propone que las aseguradoras tengan “libertad de contrato” con los establecimientos públicos y las mutuales. Esto significa que las isapres puedan ocupar camas del sector público y las reservadas para los accidentes laborales. No quieren seguir pagando clínicas privadas, sino que desplazar a los trabajadores y a los pobres y ocupar las camas con los clientes isapres.

Como ahora los hospitales públicos por ley deben atender exclusivamente a los beneficiarios de Fonasa, el equipo de Piñera plantea una ley para lograr la autonomía para ofertar a los más ricos las camas y las horas médicas de todos los hospitales y consultorios. Es decir, las compañías aseguradoras no invierten en nada y quieren profitar de la inversión hecha por el Estado. Las consecuencias de una política así serían catastróficas para la salud de los chilenos. ¿Se imagina a los hospitales compitiendo entre sí para atender primero a los que tengan un mejor seguro y paguen más?; ahora sí que a los pobres no les tocaría nunca. Como si esto fuera poco, Piñera no busca aliarse solamente con las isapres y las aseguradoras, sino con los empresarios de megacentros de salud y con los que quieren invertir en clínicas y consultorios. A estos ofrece otro negocio. Asignar poblaciones a entidades privadas. ¿Qué significa? Que quiere privatizar la salud. El financiamiento actual de hospitales y consultorios de la red pública se basa en que éstos se hacen cargo de la población de un territorio. Se pretende con esta medida suplantar el rol de los establecimientos públicos y recibir los dineros que el Estado y los cotizantes de Fonasa aportan hoy. Para asignar los aportes del Estado a esta salud de centros privados se propone además que sean pagos prospectivos. Esto quiere decir que primero se paga y después se efectúan las acciones. ¿Dónde van los excedentes? Al bolsillo de la empresa.

La propuesta de Piñera es un negocio. No mejora los niveles de salud. Amenaza con empeorarlos y derribar lo que tanto nos ha costado forjar. Sólo mejora los ingresos de los empresarios de las aseguradoras, las isapres y los megacentros de salud. La propuesta de Lavín no se queda atrás. Dice prácticamente lo mismo. Busca abrir más espacios al negocio de la salud. Tras la fachada de una salud primaria familiar, se esconde un interés todavía más agresivo que el de Piñera por privatizar la atención primaria. Pero Lavín no sólo pretende que los megacentros le quiten la atención a los municipios, sino que los médicos de los centros privados de los barrios tengan población asignada sin formar parte de la red de servicios. Una especie de salud subsidiada de segunda categoría.

La propuesta de Bachelet es diametralmente opuesta. Para que las garantías en salud lleguen a todos los chilenos resulta fundamental el fortalecimiento y la modernización del sector público. Hospitales y consultorios en red, funcionando de forma mancomunada, con un equipamiento de primera línea para atender con oportunidad y calidad a todos, sin que nadie quede excluido. Esa es la diferencia.

El piñerismo, los concertacionistas y el por-venir de la Izquierda

El piñerismo, los concertacionistas y el por-venir de la Izquierda

Escrito Por Leopoldo Lavín Mujica

viernes, 22 de enero de 2010

No necesitamos la ingenua pureza del niño de la fábula —ese que rompió con la espiral del silencio— para percibir que “el rey está desnudo”. La panoplia de poderes instrumentales de la oligarquía económica y política chilena resplandecerá diáfana en medio del caos, las traiciones, los ajustes de cuentas y la implosión concertacionista.
Pero no todo será miel sobre hojuelas para el empresario-presidente. Aunque el staff piñerista trate incluso de limitar los daños de la caída de una hoja, en los meses venideros vendrán los previsibles escándalos, producto de los presumibles negociados y arreglines de los nuevos tecnócratas del “cambio” (‘diplomados en economía y management en las mejores universidades de EE.UU’, reza la monserga), provenientes en su mayoría del sector privado y que coparán el aparato burocrático de Estado.

En el centro del escenario político estará el Empresario-Sol, agitándose nervioso durante cuatro años en el trono ejecutivo del poder, gerenciando al país como una empresa; ahí donde lo pre-vieron potenciado y gobernando los artífices visionarios del régimen político y constitucional diseñado hace un cuarto de siglo por los operadores “intelectuales” UDI (no tardarán en recordárselo los surnumerarios pontífices guardianes de la ortodoxia beato-conservadora). Ah, no será extraño que en el nuevo gabinete, salpicados entre medio de ultraliberales y conservadores de viejo cuño, se encuentren algunos progresistas-liberales. Una idea fija determinará el actuar político de la empresa piñerista: el Estado es un botín, no se transa; una vez conquistado, no se cede.

Es lo propio de la psicología depredadora del empresario-financiero y conquistador de posiciones ventajosas en el mercado.

El dispositivo mediático tradicional adicto e incólume estará en posición firme; bien aceitado para establecer un cerco de imagen securitario en torno al tejado de vidrio de la Presidencia. Lo hará desinformando, filtrando, omitiendo, espectacularizando, distrayendo. Ya sea, manipulando las emociones como construyendo día a día la “agenda setting de la derecha empresarial y política. (estableciendo la jerarquía en las prioridades llamadas públicas).

Para qué hablar de la política exterior. Esta se someterá sin más a los designios imperiales más conservadores y avalará la neocolonización de Latinoamérica con la estrategia del Poder inteligente de los Demócratas y la del poder militar y tecnológico del Southern Command de los Republicanos (*).

En esta estrategia imperial conjunta, lo humanitario, lo político y los negocios se confunden y tienen el mismo objetivo: proyectar la potencia imperial, ocupando territorios e instalando gobiernos sumisos para exigir “seguridad jurídica” a los intereses de la empresa privada norteamericana y global. También en este terreno la concertación fue obsecuente con los “intereses globales”. Uno de sus hijos mimados, J.M. Insulza, acaba de avalar, sin chistar, el golpe institucional en Honduras en contra el gobierno legítimo de Zelaya, traicionando el espíritu y la letra de la Carta democrática de la OEA.

No hay por donde perderse, ni llamarse a engaño. Los concertacionistas le pavimentaron el camino al proyecto Piñerista; plagándolo de las “buenas intenciones” mercadistas y capitalistas con retoques de inocuo progresismo. El motor del lucro fue legitimado con la derecha en educación; lo mismo en salud (Piñera es propietario del más moderno centro de salud para pudientes); en información (absolutamente nada se hizo para ayudar al derecho al pluralismo informativo) y sólo ahora, después del coraje de un periodista al resistir a plegarse a las exigencias del presidente y empresario mediático, los dirigentes del gremio levantan la voz.

Y qué decir de la situación precaria de los trabajadores en el plano de los derechos colectivos, sacrificada por el concertacionismo en nombre de la crisis y en el altar de la productividad empresarial.

Fue la constante. Cuando los concertacionistas quisieron posar de modernos y progresistas optaron siempre por el parámetro mercadista y descartando con argumentos de mala leche el de los derechos democráticos y colectivos de las mayorías para declararse como tales. Como el liberalismo, el “progresismo” funciona como justificador de las políticas de derecha.

Por supuesto. Piñera continuará con lo realizado acentuando las soluciones capitalistas que beneficiarán a los ricos y poderosos. La carrera hacia una sociedad gobernada por los mercados y el lucro se profundizará. Con la legitimidad que le habrá dejado la Concertación, e incluso su propia disidencia, como la de M. Enríquez-O, que aunque aparezca oposición novedosa al sistema, también contribuyó a fortalecer las opciones mercadistas y empresariales para resolver los problemas (no por azar sus ex asesores y amigos economistas hoy están con Piñera). Enríquez-O, no hay que olvidarlo, acarreó agua ideológica al molino piñerista.

¿Cómo creer entonces en la cantinela de los nuevos liderazgos y en la de la recomposición de una mal llamada “centro-izquierda progresista” para volver a gobernar el 2014? Repetir que la mayoría de la ciudadanía es de “centro-izquierda-progresista” nada resuelve si no hay debates acerca de un programa- proyecto de sociedad alternativo al liberalismo piñerista o al concertacionismo centro-progresista, en cada aula, cátedra, iglesia, fábrica, barrio, territorio mapuche, movimiento social y medio alternativo.

Una recomposición en torno a “nuevos liderazgos” concertacionistas nada augura de bueno para un proyecto alternativo al neoliberalismo o ultraliberalismo de la derecha piñerista. Como en Italia, cuando Berlusconi vencido en su tentativa de reelección en 1995 por un conglomerado centro-progresista, “heteróclito, paliducho y sin proyecto” (Serge Halimi), volvió a triunfar seis años más tarde.

El programa concertacionista de la mal llamada centro-izquierda progresista fracasó. Es necesario un nuevo programa antineoliberal, que retome lo fundamental del de la candidatura de Jorge Arrate y de su liderazgo. Sólo así impediremos que los derrotados se repitan el plato. Pero este programa debe ser debatido y asumido por un movimiento de reagrupamiento de una izquierda política y social auténtica, que no le de tregua ni al concertacionismo, ni a la derecha.

Se puede hacer. Es el desafío de la izquierda por construir. Siempre que este proyecto se apoye en las movilizaciones sociales en torno a las reivindicaciones ciudadanas y populares. Sólo de esta manera, a esta política vendrán los concertacionistas de izquierda.

Porque de lo que se trata es de construir liderazgos ciudadanos y populares... pero colectivos, sociales, democráticos.

Las cúpulas concertacionistas se dedicaran a colmatar las brechas de manera discursiva y a tender un manto del olvido acerca de sus responsabilidades en el ascenso al poder de la alianza liberal-pinochetista. Las dirigencias concertacionistas derrotadas intentarán pegar los platos rotos e incluso no dudarán en utilizar las categorías del marxismo y de la lucha de clases en su épica antipiñerista. Algunos ya hacen gárgaras con “trinchera”, “pueblo”, “trabajadores”, “oprimidos”, “oligarquía”, “explotadores”. etc. Otros tratarán de reconstruir una nueva dirección con viejas ideas, pero con rostros maquillados. Es el proyecto de Ricardo Lagos: una retórica progresista, una práctica inconsecuente y una crítica discursiva al piñerismo. Pero una vez en el gobierno volverán a lo mismo: mantendrán con reformas a cuentagotas el sistema que perpetúa la desigualdad, el endeudamiento de la clase media y popular, la destrucción del medio ambiente y el poder estructural de los ricos y poderosos.

Las voluntades de izquierda necesitamos una metodología de la unidad para … reagruparnos y, con un actuar abierto a los posibles, aprovechar las ventajas que ofrece cada situación. Construyendo historia sin dogmatismos. Esbozando un perfil para un futuro humano: una hipótesis estratégica que atraiga a los espíritus jóvenes, proletarios, profesionales (a los miles que tendrán trabajos precarios y mal pagados, los del “millón de empleos” del piñerismo) y estudiantiles; un nuevo horizonte ético ecosocialista, “sin el cual la voluntad renuncia, el espíritu de resistencia (contra las aberraciones capitalistas) capitula, la fidelidad falla, la tradición se pierde” (Daniel Bensaïd).

(*) Como en Grecia (450-404 A. de J.C.) y Roma en tiempos de sus imperios (siglo II al IV D. de J.C.), EE.UU es imperialista en el plano de su política exterior y, en el interior debe responder a las presiones democráticas del “demos”. Como el circo romano del consumo con endeudamiento se acabó ahora se trata de ponerle freno a los excesos. Esto explica las medidas (moderadas) contra la voracidad y control del sistema financiero que el presidente Obama está aplicando contra el poder de Wall Street.

*Militante de la Izquierda chilena

SEBASTIAN PIÑERA anuncia cirugía mayor a la salud.

SEBASTIAN PIÑERA anuncia cirugía mayor a la salud.
SEBASTIAN PIÑERA visitó este sábado el Hospital del Trabajador y se reunió con médicos, pacientes y funcionarios del recinto.
Candidatos a PresidenteRegión MetropolitanaEstación CentralDistrito 20Circunscripcion 7
Martes 13 de Octubre del año 2009 / 10:21


Sebastián visitó este sábado el Hospital del Trabajador y se reunió con médicos, pacientes y funcionarios del recinto. Allí, dio a conocer sus propuestas en materia de salud y junto al gerente general de la Asociación Chilena de Seguridad, Eduardo Undurraga, destacó la calidad de la atención del centro asistencial.

“Es un orgullo y un lujo para los trabajadores y para todos los chilenos tener un sistema de protección de la salud y de la seguridad del trabajador como lo tenemos en Chile. Ojala todos los chilenos pudiéramos tener la misma salud que se da en este Hospital del Trabajador”.

Sebastián anunció una “cirugía mayor” al sistema de salud, destacando entre las medidas más importantes de su futuro gobierno, las siguientes:

-La eliminación gradual del 7% de salud para todos los jubilados más vulnerables

-El fortalecimiento de la salud primaria mediante la construcción de postas y policlínicos para que la gente tenga acceso a la salud cerca de los lugares que vive, dotados de insumos médicos, ambulancias y médicos especialistas (pediatras, obstetras, oftalmólogos, traumatólogos, medicina general, dentistas y salud mental) para evitar que la gente sea permanentemente derivada a otras ciudades.

-El fomento y la promoción de una vida más sana y menos sedentaria. Para ello, Piñera anuncio que llevará el deporte a todos los hogares de Chile.

-Campañas educativas para prevenir y reducir el consumo de tabaco y alcohol.

-La promoción de hábitos de alimentación más sanos.

-La creación de un Bono Auge

-La disminución de los tiempos de interconsulta

-La construcción de diez nuevos hospitales y 76 nuevos consultorios de clase mundial.

-La modernización de 50 hospitales y más de 200 consultorios dotados de médicos especialistas en todas las regiones de Chile.

Además, Sebastián visitó la Cámara Hiperbárica de oxigenación, conocida por ser una de las terapias favoritas de los deportistas como Carlo de Gavardo para recuperarse de las lesiones.

Respecto de la encuesta publicada hoy por La Tercera que lo da como ganador, tanto en primera como en segunda vuelta, y con un amplio margen de ventaja frente a Eduardo Frei y Marco Enríquez-Ominami, Piñera agradeció el apoyo y las muestras de cariño que ha recibido a lo largo de Chile.

“La verdad es que estoy profundamente agradecido del apoyo de la gente que se refleja en esta encuesta y en muchas otras, pero sobre todo que se refleja en la calle, en los abrazos, los besos, los gestos, las palabras, los mensajes de optimismo, de fe, de esperanza, y yo quiero hacer un compromiso con todos los chilenos: Vamos a hacer un gobierno para todos los chilenos, un muy buen gobierno, pero especialmente para la gente de la clase media, para la gente que más lo necesita. Ellos van a ser los regalones en nuestro futuro gobierno”, sostuvo el abanderado.


http://pinera2010.cl/2009/10/10/sebastian-anuncia-%e2%80%9ccirugia-mayor%e2%80%9d-a-la-salud/

LOS COMPROMISOS DE SALUD DE PIÑERA

“BONO DE GARANTÍA AUGE”. Los grupos más vulnerables, de clase media, los adultos mayores y las personas con discapacidad podrán ser atendidos en el sector privado si los consultorios y hospitales públicos no cumplen la garantía de una salud oportuna.

MÁS Y MEJORES HOSPITALES Y CONSULTORIOS. Construiremos 10 hospitales y 76 consultorios de última generación. Además, modernizaremos y dotaremos de equipos a los actuales hospitales y consultorios y ampliaremos sus horarios de atención.

MÁS MÉDICOS ESPECIALISTAS, AMBULANCIAS Y MEDICAMENTOS. Así mejoraremos la capacidad de resolución de los problemas en la atención de los consultorios y hospitales y evitaremos que los remedios venzan o se pudran en bodegas.

VEREMOS ...DIJO UN CIEGO

Sanidad retira cautelarmente el fármaco para perder peso Reductil

Sanidad retira cautelarmente el fármaco para perder peso Reductil


La Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS), del Ministerio de Sanidad, ha ordenado la suspensión cautelar de la venta en farmacias de sibutramina, comercializada en España como "Reductil" por Abbott para favorecer la pérdida de peso, por recomendación de la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) al considerar que el beneficio esperado del fármaco no supera el potencial riesgo cardiovascular.



Según explica la AEMPS, la decisión se ha adoptado tras la revisión de los resultados preliminares del estudio SCOUT (Sibutramine Cardiovascular OUTcome trial) y los datos disponibles sobre la eficacia de sibutramina, en función de los cuales el Comité de Medicamentos de Uso Humano (CHMP) de la EMA ha concluido que, "con la información actualmente disponible, el balance beneficio-riesgo de sibutramina es desfavorable".

Este estudio SCOUT, diseñado para conocer el impacto de la pérdida de peso obtenida con el tratamiento con sibutramina sobre el riesgo cardiovascular en pacientes con alto riesgo cardiovascular, incluyó aproximadamente 10.000 pacientes con una duración de tratamiento de hasta 6 años y concluye que el beneficio a largo plazo en pérdida de peso fue "muy modesto" frente al placebo, mientras se registraba un incremento del riesgo cardiovascular de ictus o infarto de miocardio del 16 por ciento.

Las autoridades sanitarias han considerado que, aunque la mayoría de los pacientes incluidos en este estudio no serían candidatos reales a utilizar sibutramina (fundamentalmente por presentar patología cardiovascular que supone una contraindicación del tratamiento), el comité ha considerado que los resultados del estudio son relevantes también para el uso del medicamento en la práctica clínica habitual, "ya que los pacientes con sobrepeso ya de por sí suelen tener mayor riesgo cardiovascular y éste puede ser difícil de identificar".

La suspensión de la comercialización del fármaco se formalizará con la correspondiente decisión de la Comisión Europea. Entre tanto, la AEMPS ha recomendado a los médicos que no prescriban "Reductil" a partir del próximo 1 de febrero, por lo que no deben iniciarse nuevos tratamientos ni continuarse los actualmente en curso. A los farmacéuticos les indica, por su parte, que no prescriban el medicamento ni incluyan la sibutramina en ninguna fórmula magistral desde esa misma fecha.

Abbott "discrepa respetuosamente" de la suspensión

Laboratorios Abbott expresó "discrepancia respetuosa" con la decisión de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS).

La compañía, que ha confirmado que actuará "de inmediato para cumplir con las recomendaciones del Comité de Medicamentos de Uso Humano (CHMP) de la EMA", insiste no obstante en un comunicado oficial en que la sibutramina (el principio activo de "Reductil") "tiene un perfil positivo de beneficio/riesgo cuando es utilizado apropiadamente en el grupo de pacientes indicado".

La suspensión cautelar de la venta de este tratamiento indicado para pacientes obesos sin historial previo de enfermedades cardiovasculares y que no han sido capaces de perder peso con dieta y ejercicio, se ha adoptado tras la revisión de los resultados preliminares del estudio SCOUT (Sibutramine Cardiovascular OUTcome trial) y con datos disponibles sobre la eficacia de sibutramina, en función de los cuales el CHMP) ha concluido que, "con la información actualmente disponible, el balance beneficio-riesgo de sibutramina es desfavorable".

La realización de este estudio constituye un compromiso post-comercialización para evaluar la seguridad cardiovascular en pacientes de alto riesgo con un historial de enfermedades cardiovaculares, de ahí que, según precisa Abbott, "la mayoría" de los 10.000 pacientes que han participado en este estudio sufrían una enfermedad cardiovascular subyacente, lo que les descartaría para utilizar este fármaco, como se especifica en su ficha técnica.

Por ello, el laboratorio apunta que los resultados del estudio "no cambian su opinión de que sibutramina tiene un perfil positivo de beneficio/riesgo cuando es utilizado apropiadamente en el grupo de pacientes indicado" y que "muchos pacientes se benefician" de este fármaco.

En este sentido, recuerdan que fuera de la Unión Europea, Islandia y Noruega (donde se ha suspendido la venta), sibutramina continúa disponible y debe ser utilizado de acuerdo con la ficha técnica de producto. Así, la Agencia para el Medicamento y Alimentos de Estados Unidos (FDA) continúa con la revisión del estudio SCOUT y ha iniciado el cambio en la ficha técnica y el producto continúa en el mercado estadounidense, al igual que en Australia.

Para los pacientes de estos países que utilizan "Reductil", Abbott señala que pueden continuar con su uso de acuerdo con la ficha técnica, mientras que a los europeos les aconseja contactar con su médico.

El derecho a la salud


El derecho a la salud

El goce del grado máximo de salud que se pueda lograr es uno de los derechos fundamentales de todo ser humano sin distinción de raza, religión, ideología política o condición económica o social.
- Constitución de la OMS

El derecho a la salud obliga a los Estados a generar condiciones en las cuales todos puedan vivir lo más saludablemente posible. Esas condiciones comprenden la disponibilidad garantizada de servicios de salud, condiciones de trabajo saludables y seguras, vivienda adecuada y alimentos nutritivos. El derecho a la salud no se limita al derecho a estar sano.

Enlaces conexos

:: Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos


El derecho a la salud está consagrado en numerosos tratados internacionales y regionales de derechos humanos y en las constituciones de países de todo el mundo.

Ejemplos de tratados de las Naciones Unidas sobre derechos humanos:

* Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales, 1966
* Convención sobre la eliminación de todas las formas de discriminación contra la mujer, 1979
* Convención sobre los Derechos del Niño, 1989

Ejemplos de tratados regionales de derechos humanos:

* Carta Social Europea, 1961
* Carta Africana de Derechos Humanos y de los Pueblos, 1981
* Protocolo Adicional a la Convención Americana sobre Derechos Humanos en materia de Derechos Económicos, Sociales y Culturales (Protocolo de San Salvador), 1988

El Artículo 12 del Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales (1966) dice que, entre las medidas que se deberán adoptar a fin de asegurar la plena efectividad del derecho a la salud, figurarán las necesarias para:

* la reducción de la mortinatalidad y de la mortalidad infantil, y el sano desarrollo de los niños;
* el mejoramiento de la higiene del trabajo y del medio ambiente;
* la prevención y el tratamiento de las enfermedades epidémicas, endémicas, profesionales y de otra índole, y la lucha contra ellas;
* la creación de condiciones que aseguren el acceso de todos a la atención de salud.

Para aclarar y hacer operacionales las medidas arriba enumeradas, el Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales de las Naciones Unidas, que supervisa la aplicación del Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales, adoptó en 2000 una Observación general sobre el derecho a la salud.

Dicha Observación general dice que el derecho a la salud no sólo abarca la atención de salud oportuna y apropiada sino también los principales factores determinantes de la salud, como el acceso al agua limpia potable y a condiciones sanitarias adecuadas, el suministro adecuado de alimentos sanos, una nutrición adecuada, una vivienda adecuada, condiciones sanas en el trabajo y el medio ambiente, y acceso a la educación e información sobre cuestiones relacionadas con la salud, incluida la salud sexual y reproductiva.

Según la Observación general, el derecho a la salud abarca cuatro elementos:

* Disponibilidad. Se deberá contar con un número suficiente de establecimientos, bienes y servicios públicos de salud, así como de programas de salud.
* Accesibilidad. Los establecimientos, bienes y servicios de salud deben ser accesibles a todos dentro de la jurisdicción del Estado Parte.
o no discriminación
o accesibilidad física
o accesibilidad económica (asequibilidad)
o acceso a la información
* Aceptabilidad. Todos los establecimientos, bienes y servicios de salud deberán ser respetuosos de la ética médica y culturalmente apropiados, a la par que sensibles a los requisitos del género y el ciclo de vida
* Calidad. Los establecimientos, bienes y servicios de salud deberán ser apropiados desde el punto de vista científico y médico y ser de buena calidad.

Al igual que todos los derechos humanos, el derecho a la salud impone a los Estados Partes tres tipos de obligaciones, a saber:

* Respetar. Exige abstenerse de injerirse en el disfrute del derecho a la salud.
* Proteger. Requiere adoptar medidas para impedir que terceros (actores que no sean el Estado) interfieran en el disfrute del derecho a la salud.
* Cumplir. Requiere adoptar medidas positivas para dar plena efectividad al derecho a la salud.

Según la Observación general mencionada, el derecho a la salud también comprende «obligaciones básicas» referentes al nivel mínimo esencial del derecho. Aunque ese nivel no se puede determinar en abstracto porque es una tarea nacional, para guiar el proceso de establecimiento de prioridades se enumeran los siguientes elementos fundamentales: atención primaria de salud esencial; alimentación esencial mínima nutritiva; saneamiento; agua limpia potable; medicamentos esenciales. Otra obligación básica es la de adoptar y aplicar una estrategia y un plan de acción nacionales de salud pública para hacer frente a las preocupaciones en materia de salud de toda la población; esa estrategia y ese plan deberán ser elaborados, y periódicamente revisados, sobre la base de un proceso participativo y transparente; deberán prever indicadores y bases de referencia que permitan vigilar estrechamente los progresos realizados; se deberá prestar especial atención a todos los grupos vulnerables o marginados.

Los Estados Partes deben adoptar medidas de conformidad con el principio de realización progresiva. Esto significa que tienen la obligación de avanzar lo más expedita y eficazmente posible, tanto por sí mismos como con la asistencia y la cooperación internacionales, hasta el máximo de los recursos de que dispongan. En este contexto, es importante establecer una distinción entre la incapacidad de un Estado Parte de cumplir sus obligaciones contraídas en virtud del derecho a la salud y la renuencia a cumplirlas.
Para más información, puede ponerse en contacto con:

WHO Media centre
Tel.: +41 22 791 2222
E-mail: mediainquiries@who.int

EL DERECHO A UNA ATENCION MEDICA DE CALIDAD



EL DERECHO A UNA ATENCION MEDICA DE CALIDAD
The right to a good quality

Eduardo Rosselot J*.


Quality has a central role in medical care. The satisfaction of the rights of people to medical care, presupposes good quality medical acts. The meaning of quality goes further than a good attention based on scientific evidence and with competent skills. It comprises patient-physician relationship where professional behavior is evaluated, based on the fundamental principles of bioethics. These principles sustain the measures to control quality of medical actions, to comply with the rights of patients to have access to a good professional care (Rev Méd Chile 2000; 128: 1385-88).
(Key-Words: Patients rights; Health Care Quality; Access; Physician-Patient relation)

*Director de la Direción Técnica de Educación en Ciencias de la Salud. Facultad de Medicina, Universidad de Chile.

La calidad en la atención médica juega un papel central en las prestaciones de salud que los profesionales realizan a sus pacientes. De la misma manera, se valora esa caracteística en las acciones de proyección social que los sistemas de salud efectúan para cumplir sus objetivos sanitarios. En esta segunda situación existe, sin duda, una responsabilidad pública de dar cumplimiento eficaz al servicio, mientras en el primer caso sólo podía advertirse un deber de responder, con la mayor perfección del acto profesional, a la confianza individual del beneficiario.

Responsabilidad pública es sinciónimo de cumplimiento de una obligación hacia la comunidad con la cual se ha convenido, explícita o tácitamente, efectuar una tarea. De esa connotación surge el deber de realizar con calidad, es decir, logrando plenamente los objetivos finales, la acción sanitaria comprometida. Para Diego Gracia1, la expresción concreta de esa responsabilidad se da en la conciencia moral individual y en el rendir "cuenta" a la sociedad, una forma hispánica de la "accountability" sajona2, que hoy se exige a la generalidad de los actos institucionales.

En la atención médica individual, la exigencia de calidad resulta del sentido que el acto médico adopta para la persona que lo requiere. Al estimar que la atención de salud es un derecho del paciente(*), el que las intervenciones médicas sean de calidad constituye, a su vez, un requerimiento de derecho positivo de las personas susceptibles de invocarlo.

Aun cuando, la calidad pudiera ser interpretada en una acepción de máxima excelencia del bien que representa (y en Medicina se tendeía al mayor rigor en esa exigencia por tratarse de bienes o servicios con efectos sobre personas), como caracteística de un producto pudiera aceptarse como el bien que es bueno (para su objetivo), en tanto que como expresción de un servicio, debiera definirse como el mejor bien disponible dentro de esa categoía, en función de su significado y de sus destinatarios. La calidad, en tales casos, constituye un valor ético cuya cautela corresponde a quien lo otorga para garantía del derecho de quien lo demanda.

Siguiendo la postura del mismo Diego Gracia, la mejor calidad disponible proveeía una ética de mínimos, por cuanto un menor nivel de satisfacción de los requerimientos de calidad implicaría un eventual daño o, al menos, frustración de las aspiraciones de salud. En este contexto, la calidad tiene que ser garantizada normativamente y así concretar un derecho respaldado por la justicia.

En el terreno predominantemente científico-técnico en que discurre la medicina moderna, la calidad exige sustentación basada en evidencias, idciónea formación profesional, permanente actualización de los conocimientos, visión crítica de las innovaciones no solventadas por experiencia factual4-6, en suma, los atributos que configuran a un experto. Satisfacer tales condiciones, en una sociedad rigurosa de la legitimidad y de los contenidos de las respuestas a sus propuestas, es la motivación más fuerte para los procedimientos de acreditación, certificación y recertificación de las capacidades, tanto de los sistemas como de los individuos involucrados en la dación de servicios y en el ejercicio de competencias7.

Es a este aspecto, igualmente, al que se alude en el fondo cuando hay demandas de incompetencia o negligencia, que trasuntan eventual falta de idoneidad profesional y donde subyace la acusación de transgresción de confianza en la calidad del ejercicio médico que el paciente ha depositado en un supuesto experto y que, a la luz de los conceptos en discusción, se manifiesta como una clara conculcación de sus derechos.

Así, bajo las más diversas perspectivas, en Medicina, calidad traduce las condiciones que hacen eficaz el acto si se considera como un procedimiento técnico y dan plena satisfacción al cliente si se mira como un servicio. Pero, en ambos casos, estos son elementos subjetivos en cuanto consecuencias de la intervención médica y no una cualidad del acto mismo. Este, se enriquece y amplifica incluso, no sólo por sus efectos directos en la salud, que constituye su primera razción, sino que por la resonancia impuesta, especialmente en el ámbito emocional de la persona receptiva y su entorno.

A ese respecto, es imprescindible considerar cuales son las expectativas de un paciente respecto a una atención médica que él pueda considerar de calidad y que completan esa atmósfera. De algún modo, sin que le quepa al profesional la posibilidad de preterir el aspecto técnico frente a otros de especial consideración para quien aspira a una atención, son aquéllas las que, probablemente, juegan un papel preponderante en el juicio que se hace al tipo de servicio. Delbanco8 ha resumido las preocupaciones que aparecen esenciales en los pacientes expuestos a enfermedad y que, por lo demás, se expresan en el reconocimiento y cíticas que ellos hacen, en nuestro medio por ejemplo, al comportamiento profesional9 (Tabla 1).


El conjunto de estas aspiraciones, sin duda, completa la apreciación de calidad de un acto médico y son todas ellas las que se estiman exigibles en las enumeraciones o cartas de los derechos de los pacientes que surgen como consecuencia del respeto debido a su dignidad, razción demás de su legítima autonomía1,5. Por ello no es extraño que en la evolución histórica se advierta un desplazamiento conceptual trascendente, desde la visción hipocrática en que el acto médico constituye un don (gratuito) del médico (benefactor o proveedor) hacia un derecho (exigible) del beneficiario (paciente o usuario). En este eje, que transcurre desde una perspectiva de beneficencia hasta el impedir maleficencia o daño, el criterio central y amplio de calidad se equilibra entre la equidad (valor social asentado en la justicia) y la autonomía, como valor individual asentado en la dignidad de la persona (Figura 1).


En el plano de los principios referidos10 resalta, y se confirma, la correcta valoración de la calidad como un derecho de los pacientes y su sustentación en bases éticas indiscutibles, más allá de disposiciones legales o normativas que, dependiendo de diferentes criterios y resoluciones administrativas, políticas o sociales, tendrán que adoptarse para cautelar su cumplimiento. Por ahora, un paso y contraparte esencial de estos enunciados es que los beneficiarios conozcan claramente sus derechos y que les sea factible demandar su cumplimiento. Ello impedirá, también, que se transgredan por omisión o se preste para exigir aspectos no contemplados que impongan resguardos inconsultos u onerosos a las acciones médicas, con mayor perjuicio para los mismos pacientes. Hay, por lo tanto, un deber de prudencia que tiene que ser aplicado por la sociedad, además de los propios, y directamente, implicados para que no se arriesgue la eficacia del derecho (Tabla 2).


Los pasos que universalmente se están dando, en diferentes instancias, para dar confianza sobre la idoneidad de los actos de los profesionales de salud y que se traducen en el concepto amplio de acreditación, constituyen sin duda la mejor garantía y seguridad de respeto a las aspiraciones que, en términos de derechos, plantean los pacientes y les reconoce la sociedad.

(*)El derecho a la salud y (menos) el derecho a la atención de salud como conceptos, son materia de discusción3, pero, en lo concreto y en declaraciones formales de organismos internacionales, se acepta especialmente el último como un derecho positivo de la persona.

REFERENCIAS

1. Gracia D. Ëtica y Responsabilidad Profesional; En: Profesión Médica, Investigación y Justicia Sanitaria. Ed. El Buho Colombia 1998; 39-57.

2. Relman AS. Assesment and accountability. The third revolution in medical care. N Engl J Med 1988; 319: 1220-2.

3. Sotomayor MA. Derecho a la salud: aspiración o derecho efectivo? Cuad Programa Regional Bioética 1997; 5: 47-62.

4. Warren KS, Mosteller F. Doing more good than harm. Ann N York Acad Sci 1993; 703.

5. Rosselot E. Aseguramiento de la calidad profesional. Un nuevo marco ético para el ejercicio de la medicina. Rev Méd Chile 1999; 127: 1375-83.

6. Rosselot E. Derechos del paciente, en el marco de calidad de la atención médica. Rev Méd Chile (Enviado para publicación).

7. Rosselot E. Control de Calidad en la Profesción. Acreditación en Medicina. Bol Acad Chile Med 1998; 35: 65-82.

8. Delbanco TL. Enriching the doctor-patient relationship by inviting the patients perspective. Ann Int Med 1992; 116: 414-7.

9. Mancini R, Uribe R, Sepúlveda E, Robles M. Imagen de los Médicos. Vida Médica, Santiago de Chile 1992; 44: 16-22.

10. Beauchamp TL, Childress JF. Principles of Biomedical Ethics. 4th ed. New York: Oxford University Press 1994.


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NIVEL SATISFACCION LABORAL DE LA ENFERMERAS EN HOSPITALES PUBLICOS Y PRIVADOS



NIVEL DE SATISFACCIÓN LABORAL EN ENFERMERAS
DE HOSPITALES PÚBLICOS Y PRIVADOS
DE LA PROVINCIA DE CONCEPCIÓN, CHILE

NURSE’S JOB SATISFACTION IN PUBLIC AND PRIVATE HOSPITAL OF
PROVINCE OF CONCEPCIÓN, CHILE

BEATRIZ FERNÁNDEZ LARRAGUIBEL* y TATIANA PARAVIC KLIJN**

RESUMEN

Investigación de tipo descriptivo y correlacional que tuvo como objetivo principal determinar el nivel de satisfacción laboral de las enfermeras de centros hospitalarios públicos y privados. Se planteó que las enfermeras de los servicios privados presentaban mayor nivel de satisfacción laboral que las de los servicios públicos, y que existían diferencias significativas en el nivel de satisfacción laboral de las enfermeras, según el lugar de postulación de Enfermería al ingreso a la universidad. Se trabajó con una muestra total de 248 enfermeras hospitalarias. Se utilizaron los siguientes instrumentos recolectores: Índice de Descripción del Trabajo de Smith et al.; subescala de condiciones del trabajo de Bolda; además de preguntas relacionadas con las variables sociodemográficas y con la satisfacción en su vida personal, entre otras. Algunos de sus resultados más relevantes fueron: las enfermeras hospitalarias se encuentran sólo levemente satisfechas en su trabajo, indicando mayor satisfacción las enfermeras de los hospitales privados. Las condiciones físicas del trabajo se destacan por ser un factor de insatisfacción para las enfermeras hospitalarias, principalmente para las del sector público. Los factores remuneraciones, promociones y/o ascensos son aquellos con los que se encuentran más insatisfechas las enfermeras de ambos grupos. La interacción con sus pares, su supervisor y las actividades que realizan son aquellos factores con los cuales obtienen mayor satisfacción. Se encontró, además, que el nivel de satisfacción laboral de las enfermeras no guarda relación con el lugar de postulación a Enfermería al ingresar a la universidad.

Palabras claves: Satisfacción laboral, enfermeras, hospitales públicos y privados.

ABSTRACT

This research is a descriptive, and correlational one. The main purpose was to establish the level of job satisfaction in the case of those nurses working at both public and private Hospital Centers in the Province of Concepción (Chile). Such research has stated that nurses who work at private medical centers have a higher level of job satisfaction than those at public centers. Besides, there is also a differential among nurses’ labor satisfaction level itself that has also been hypothetically claimed. The latter depends on what the program of nursing’s choice was - within a numbered selection list - when applying for it. A 248-nurses-sampling was chosen. The following tools for data collecting were used, the Index of Job Description of Smith et. al.; Bolda’s sub-scale; dealing with working conditions was also considered. The following were some of the most outstanding results: Hospital nurses show just a slight satisfaction regarding their jobs, while meaningful differences can be found between nurses working in the public and private area. With respect to the latter, nurses working in private hospital show a higher satisfaction. Physical working conditions stand out as a dissatisfaction factor in the case of hospital nurses, specially those working for the public area. Issues dealing with salaries and promotions are the ones that demonstrate greatest dissatisfaction both in private and public nurses. Interaction factors with their coworkers, supervisors, as well as with the activity they perform are the ones showing the highest satisfaction. Nurses’ labor satisfaction level was found to have no relation with what the position of their choice was by the time they applied for the nursing program at the university.

Keywords: Job satisfaction, nurses, public and private hospitals.

Recepcionado: 07.05.2002. Aceptado: 28.12.2003.

INTRODUCCIÓN

El concepto, la utilidad y función del trabajo han sido objeto de grandes controversias a lo largo de la historia. En la mayor parte de las sociedades la generalidad de las personas debe adecuarse de alguna manera a la exigencia de trabajar, por lo que las personas pasan más de la mitad de su tiempo de vigilia, durante las dos terceras parte de su vida, desempeñando algún tipo de trabajo.

Al mismo tiempo, el trabajo es una actividad de vastos alcances que se refleja e influye sobre casi todos los aspectos de la conducta humana, por lo que los individuos al desempeñar un trabajo no sólo trasladan a él sus habilidades intelectuales y motrices, sino también sus individualidades.

Por otra parte, el trabajo le proporciona al individuo la sensación de pertenencia a un sector de la sociedad que se considera importante, necesario y valioso. Para un individuo trabajar significa tener un propósito, expresarse y sentirse satisfecho de contribuir a la sociedad (Robbins, S., 1987; Milcovich, T., 1994).

A la luz de los conocimientos actuales, existe un interés creciente entre los administradores, los empleados y el gobierno, por mejorar la calidad de vida en el trabajo. Existe consenso de la necesidad de estudiar al trabajador en relación con su medio ambiente laboral en el cual está inserto, ya que cualquier variación en el conjunto integrado por el hombre, la organización y el medio ambiente, afectará forzosamente a los demás. De ahí deriva la necesidad de investigar cientos de fenómenos que ocurren a diario dentro de la organización, y uno de ellos es la satisfacción laboral, ya que extensos y variados estudios han indicado una serie de relaciones que este fenómeno tiene con la calidad de vida del trabajador, con la organización en sí y, como efecto final, con la sociedad. Existe evidencia clara que un empleado insatisfecho tiende a sufrir todo tipo de problemas de salud, tales como: cefaleas, problemas de salud mental, cardiopatías y accidentes vasculares cerebrales, entre otros (Locke, E., 1976; Stein et al., 1993; Robbins, S., 1987; Gibson, J. et al., 1985; Spector, P., 1997). Estos problemas provocarán ausentismo, rotación de personal, gastos médicos para el trabajador y costos para la empresa, los cuales van en desmedro de la organización. Como contrapartida, los estudios demuestran que la satisfacción laboral constituye un buen predictor de longevidad, de adhesión a la empresa, mejora la vida no sólo dentro del lugar de trabajo, sino que también influye en el entorno familiar y social. Estos aspectos son especialmente relevantes en los profesionales del área de la salud y en especial de las enfermeras, pues ellas deben cuidar la salud física y mental de quienes están a su cargo, y entregar una atención de buena calidad. Para ello deben estar bien y satisfechas en su trabajo.

El trabajo de las enfermeras y el ambiente donde lo desarrollan pareciera no ser el más propicio para derivar en satisfacción laboral. El cansancio, las escasas posibilidades de capacitación debido al sistema de turnos y la escasez de personal traen como consecuencia fatiga y desmoralización entre estas profesionales. El deber de realizar muchas tareas cuya complejidad es inferior a su formación y que comprometen su tiempo, le impiden concretar su función fundamental, que es junto al paciente en la entrega de atención y cuidados de éste (Sonis, A., 1976). Por otro lado, los turnos le dificultan la vida matrimonial y familiar, ya que éstos no coinciden con las rutinas normales de trabajo y estudios del resto de las personas, por lo que la enfermera requiere de muchos esfuerzos para compatibilizar sus actividades con las de su familia. Además, las bajas remuneraciones que a veces la obliga a desempeñar más de un trabajo -teniendo que asumir largas jornadas con el consiguiente desgaste que ello significa- agravan la situación. Toda esta problemática trae inevitablemente consecuencias negativas, tanto para la vida personal, laboral y tal vez para los pacientes, que repercuten finalmente en la sociedad donde vivimos (Thereau, J., 1987; Pearson & Chong, 1997).

Las enfermeras trabajan en organizaciones dedicadas a prestar ayuda en la satisfacción de la necesidad de salud de las personas; de ellas, las que trabajan en el ámbito principalmente de recuperación de la salud, lo hacen diariamente en hospitales y clínicas enfrentando múltiples problemas que derivan tanto de la atención directa del paciente, como de la administración y coordinación del equipo de salud. Es así que, durante el transcurso de mi vida laboral, he podido constatar y observar en distintos centros asistenciales los problemas y dificultades a los que se ven enfrentadas las enfermeras hospitalarias de la provincia de Concepción y que podrían estar indicando que el nivel de satisfacción laboral de éstas no es el mejor. Las enfermeras resienten los conflictos que se generan dentro de los equipos de trabajo, las dificultades con sus jefes directos, con sus pares y con el personal a su cargo, ya que éstas entorpecen la comunicación, alteran la armonía y el desarrollo del trabajo, tornándolo dificultoso y poco gratificante. Las enfermeras se molestan por el escaso espacio, muy reducido o a veces inexistente, asignado en sus lugares de trabajo, lo que ellas perciben como falta de reconocimiento hacia su grupo profesional de parte de la institución en que se desempeñan. Por otra parte, sus históricas bajas remuneraciones y los escasos ascensos son dificultades que, junto a otras, estas profesionales deben enfrentar, con el consiguiente malestar que les implica.

Es importante destacar que estas quejas y dificultades las han manifestado tanto las enfermeras de hospitales públicos como de hospitales privados, con énfasis en diferentes aspectos dependiendo del tipo de hospital que se trate.

Por todo lo anteriormente expuesto, surge la siguiente pregunta: ¿Cuál es el nivel de satisfacción laboral de las enfermeras de hospitales públicos y privados de la provincia de Concepción?

TIPO DE INVESTIGACIÓN

La presente investigación es un estudio de tipo descriptivo, correlacional.

PROPÓSITO DEL ESTUDIO

El propósito de este estudio fue determinar el nivel de satisfacción laboral de las enfermeras de los hospitales públicos y privados de la provincia de Concepción, Chile, e identificar algunos factores relacionados con esta satisfacción.

OBJETIVOS ESPECIFICOS

- Caracterizar el perfil de las enfermeras, de los hospitales públicos y privados de la provincia, según las variables sociodemográficas.
- Conocer el nivel de satisfacción laboral de las enfermeras, de los hospitales públicos y privados de la provincia, en relación a las variables sociodemográficas
- Comparar el nivel de satisfacción laboral de las enfermeras del sector público con el nivel de satisfacción de las del sector privado.
- Conocer el nivel de satisfacción laboral de las enfermeras de los hospitales públicos y privados de la provincia, en relación a las condiciones físicas de su trabajo.
- Conocer el nivel de satisfacción laboral respecto a los diversos factores del constructo trabajo en ambos grupos de enfermeras.
- Conocer el nivel de satisfacción de las enfermeras de los hospitales públicos y privados, en relación a su vida personal.
- Relacionar el nivel de satisfacción en la vida personal con el nivel de satisfacción laboral general.
- Conocer si existe relación entre el nivel de satisfacción general y el lugar de opción en la elección de la carrera de Enfermería, al momento del ingreso a la universidad.

HIPÓTESIS

- Existen diferencias significativas en los niveles promedio de satisfacción laboral, entre las enfermeras de los hospitales públicos y privados de la provincia de Concepción.
- Existen diferencias significativas en el nivel de satisfacción laboral general, según el lugar de opción al momento de la elección de la carrera de Enfermería, al ingreso a la universidad, entre las enfermeras de los hospitales públicos y privados de la provincia de Concepción.

Para esta investigación se tuvo como marco referencial teórico las conceptualizaciones de Edwin Locke, psicólogo laboral.

El modelo conceptual de Locke se basa en dos corrientes teóricas de explicación de la motivación conductual del hombre. La primera se refiere a las teorías llamadas de proceso, desde las cuales la satisfacción laboral puede ser vista como el estado resultante de la percepción que tenga el individuo de su trabajo como herramienta, que le permita alcanzar o lograr un importante valor a condición de que sus valores sean compatibles con sus necesidades y vistas como esenciales para el bienestar del individuo. Entre éstas tenemos la Teoría de las Expectativas y la Teoría de la Equidad. La segunda corriente de teorías se refiere a las teorías de contenido, y desde este punto de vista estas teorías intentan explicar qué necesidades o valores deben ser satisfechos por el individuo para estar satisfecho con su trabajo. Aquí tenemos la Teoría de las Necesidades Jerarquizadas de Maslow y la de Higiene y Motivación de Herzberg (Robbins, S., 1987; Chiavenato, Y., 1998; Dunnette, M., 1979; Gibson, J. y col., 1985). Locke, en base a la revisión de estas teorías, elabora su conceptualización y manifiesta que el individuo logra satisfacción laboral al apreciar que el trabajo le facilita la realización de valores importantes para él y que éstos son compatibles con sus necesidades. Es así que el individuo hace una evaluación de los hechos, objetos o situaciones que derivan del trabajo y según sus expectativas, sus necesidades tanto físicas como sicológicas, realiza un juicio interno de valor, el cual puede ser positivo o negativo para el individuo, por lo que tendrá una reacción emocional placentera o displacentera al respecto y en consecuencia obtendrá satisfacción o insatisfacción.

Este autor destaca la importancia de los valores del individuo, de sus necesidades, de sus expectativas, de sus percepciones y de sus juicios, especificando con su modelo causal cómo estas variables se combinan para determinar el grado de satisfacción laboral. Además, señala que para comprender las actitudes hacia el trabajo es necesario analizar los distintos factores del mismo, algunos de los cuales se estudiaron en esta investigación, tales como: las actividades propiamente tales, las remuneraciones, las condiciones físicas del trabajo, las promociones y/o ascensos, las políticas de la empresa, las relaciones con el supervisor o jefe y las interacciones con los compañeros de trabajo.

Se han realizado múltiples investigaciones respecto a la satisfacción laboral, pero sólo en las últimas décadas se han preocupado por la satisfacción de las enfermeras. Es así como diversos autores han encontrado los siguientes resultados: Kramer y Schmalenberg (1992) en EE.UU. observaron que la autonomía, el estilo de gestión y el reconocimiento por parte de la institución donde trabajaban, influían de forma importante en la satisfacción laboral de estas enfermeras. Salinas y col. (1994), en México, informaron que las enfermeras participantes en su estudio manifestaron satisfacción en todos los aspectos del trabajo a excepción del clima y la armonía intragrupo. Chávez y col. (1996), en México, indicaron que las enfermeras participantes en su investigación mostraban un nivel moderado de satisfacción laboral. Moss y Rowler (1997), en EE.UU., mostraron que el estilo participativo y cercano de dirección mejoraba la satisfacción laboral de las enfermeras. Krichkaew (1998), en Tailandia, encontró el mismo resultado. En nuestro país, Paravic (1998), Parra (2002) y Zúñiga (2002) pudieron constatar en sus respectivas investigaciones que el nivel de satisfacción laboral de las enfermeras era leve, encontrando gran insatisfacción en sus remuneraciones y en las políticas de promoción y ascenso de sus instituciones, hallazgos estos últimos recurrentes en los distintos estudios relacionados con la satisfacción laboral de las enfermeras.

SUJETOS Y MÉTODOS

La población la conformaron las enfermeras de todos los centros hospitalarios, tanto públicos como privados, de la provincia de Concepción, Chile, con un total de 447 enfermeras. En esta investigación se trabajó con el 50% de las enfermeras del sector público y el 100% de las del sector privado. Se excluyeron dos centros hospitalarios que participaron en la prueba piloto (uno público y otro privado), cada uno con seis enfermeras. Por lo que la muestra quedó constituida por 248 enfermeras hospitalarias, 147 del sector público y 101 enfermeras del sector privado.

Para la realización de este estudio se solicitó autorización a directores de Servicios de Salud de Concepción y Talcahuano, como también a los diferentes directores de los hospitales privados que se integraron en el estudio.

Los instrumentos fueron aplicados personalmente por la autora, en el lugar de trabajo de cada una de las enfermeras, en forma grupal por servicios, o por grupos afines en los diferentes hospitales tanto públicos como privados. El tiempo promedio de las respuestas a las encuestas fue de 12 minutos. Se garantizó el anonimato y confidencialidad a las enfermeras participantes, con el sellado inmediato de cada encuesta.

Para la recolección de la información se utilizaron los siguientes instrumentos: una encuesta elaborada por la autora, relacionada con los datos biosociodemográficos de las enfermeras; la subescala de condiciones físicas del trabajo de Bolda (1958), y el Índice de Descripción del Trabajo de Smith et al. (1969), el cual se compone de cinco subescalas, las que se refieren a las actitudes del trabajador frente a las actividades que realiza, interacción con los compañeros del trabajo, su jefe, las remuneraciones y los ascensos y/o promociones. Por último, se utilizó una escala análoga visual, con la que se midió el nivel de satisfacción laboral general y la satisfacción con la vida personal, además de una pregunta cerrada, relacionada con el lugar de postulación que ocupó Enfermería al momento de ingresar a la universidad.

Las escalas utilizadas en el presente estudio fueron validadas por diversos autores en estudios realizados en distintos países, tanto en su contenido como en su constructo.

En cuanto a su confiabilidad, se utilizó el Alfa de Cronbach, que demostró una alta confiabilidad.

Los datos fueron procesados en el Departamento de Estadística de la Facultad de Física y Matemática de la Universidad de Concepción. Para el análisis de los datos se dividieron en dos grupos: las enfermeras de los hospitales públicos y las enfermeras de los hospitales privados. Se utilizaron tablas de frecuencia, porcentajes, promedios, desviación estándar, t de Student, razón F y coeficiente de correlación r de Pearson.

RESULTADOS, DISCUSIÓN
Y CONCLUSIONES

El perfil biosociodemográfico de las enfermeras de los hospitales públicos se caracteriza porque la mayoría de las enfermeras tiene más de 41 años, tienen hasta 2 hijos, y tienen pareja. Un porcentaje importante trabaja más de 20 años en la institución, y sus ingresos mensuales brutos son inferiores a $ 450.000 (año 2000), a diferencia del perfil biosociodemográfico de las enfermeras de los hospitales privados, donde la gran mayoría de ellas tiene entre 23 y 40 años, hasta 2 hijos, y con pareja y, mayoritariamente, trabajan menos de 19 años en la institución, y sus ingresos mensuales brutos son igualmente bajos que los de las enfermeras de los hospitales públicos.

En general, las enfermeras se perciben levemente satisfechas con su trabajo, resultado que concuerda con los estudios de Zúñiga, Y. (2002) y Parra, S.(2002) sobre enfermeras de atención primaria y profesionales de enfermería de los SAMU, respectivamente. Se observó también que las enfermeras de los hospitales privados se encontraban más satisfechas que las de los hospitales públicos, resultado que hace aceptar la hipótesis alternativa que plantea este estudio: que existen diferencias significativas entre los niveles promedio de satisfacción laboral de las enfermeras de los hospitales públicos y privados de esta provincia.

Gráfico N° 1. Nivel de satisfacción laboral general enfermeras de los hospitales públicos y privados de la provincia de Concepción, según escala análoga visual.

Fuente: Investigación Nivel de Satisfacción Laboral de las Enfermeras de los Hospitales Públicos y Privados de la Provincia de Concepción VIII Región, Chile, 2001.

Al observar la relación entre las variables sociodemográficas y el nivel de satisfacción laboral general de las enfermeras hospitalarias, no se encontraron grandes diferencias dentro de los grupos de enfermeras de hospitales públicos y privados. Las enfermeras que se encontraban más satisfechas en ambos tipos de hospitales son aquellas que tienen entre 41 y 58 años, con 3 o más hijos, su ingreso mensual bruto es mayor de $ 600.000. Sin embargo, difieren en que se encuentran más satisfechas las de la categoría separadas de los hospitales públicos, y que tienen 5 años o menos de trabajo en la institución, a diferencia de las enfermeras de los hospitales privados, en los cuales las más satisfechas corresponden a la categoría casadas, y con 20 años y más de trabajo.

Por otra parte y en relación al servicio en el cual trabajan, las que se encuentran más satisfechas son las enfermeras de los hospitales privados que pertenecen a aquellos servicios agrupados en las categorías D (urgencia adultos, servicio de UCI y UTI), A (medicina, gastroenterología, oncología, diálisis, urología, cardiología, dermatología, salud ocupacional y unidad de toma de muestras) y B, respectivamente (cirugía, neurocirugía, pabellón, post-operatorio, traumatología, unidad de quemados, y otorrino), a diferencia de las enfermeras de los hospitales públicos, donde las más satisfechas pertenecen a la categoría F (coordinadoras generales y enfermeras de infecciones intrahospitalarias) y las enfermeras de los servicios de las categorías A y D.

Respecto a la satisfacción con las condiciones físicas del trabajo, las enfermeras de hospitales privados están más satisfechas que las enfermeras de los hospitales públicos en este aspecto, y presentan diferencias significativas y altamente significativas en casi la totalidad de los ítemes de la subescala aplicada. Ellas identifican su lugar de trabajo como riesgoso e inadecuado, el que es además asociado a falta de preocupación por su salud y seguridad de parte de la institución donde laboran.

Gráfico N° 2. Nivel de satisfacción laboral con las condiciones físicas del trabajo de las enfermeras de hospitales públicos y privados de la provincia de Concepción, según los diversos ítemes de las subescalas de Bolda.
Fuente: Idem Gráfico N° 1.

Las condiciones donde se realiza el trabajo, según la literatura revisada, influye en la satisfacción laboral de las personas, y especialmente sensibles a ellas son las mujeres (Locke, E. ,1976; Robbins, S., 1987; Sonis, A., 1987; Escuela Andaluza de Salud Pública de España, 1997; Valenzuela, S. y Do Carmo, 2000).

Avendaño y col. (1997) señalan que dentro de las características de las condiciones de trabajo de las enfermeras se encuentran las siguientes: altas cargas físicas, exposición constante a contaminantes físicos, químicos y biológicos, como también a accidentes. Por otra parte, Salvo (1996) encontró que el ruido, la iluminación, el aseo y ventilación deficiente, la temperatura inadecuada y los malos olores, sumado al tener que trabajar con equipos y materiales deficientes, era lo que más molestaba y tensionaba a las enfermeras.

En relación al nivel de satisfacción laboral de las enfermeras, respecto a cada uno de los factores del trabajo, del Indice de Descripción del Trabajo de Smith et al., ellas presentan un nivel de satisfacción sobre el punto neutro en las subescalas actividades, supervisor o jefe y grupo con quien interactúan más cercanamente, lo que indica que en estos tres aspectos las enfermeras se encuentran con una leve tendencia a la satisfacción. Sin embargo, respecto a la subescala promociones y/o ascensos, ellas se encuentran considerablemente bajo el punto neutro, lo que significa que presentan una clara tendencia a la insatisfacción, estando las enfermeras de los hospitales privados menos insatisfechas que las de los hospitales públicos. Por otra parte, el factor promociones y/o ascensos se observa como un factor muy influyente de insatisfacción laboral para ambos grupos de enfermeras, ya que son percibidas como injustas y poco transparentes dentro de las instituciones hospitalarias. Paravic, T. (1998) y Parra, S. (2002) también encontraron que las promociones y/o ascensos eran uno de los aspectos donde se encontraban más insatisfechas las enfermeras participantes en sus respectivos estudios. Robbins, S. (1987) señala que, si en la opinión de los empleados la compensación y los estímulos son justos y racionales, aumentará el nivel de satisfacción, y, si son injustos, los empleados tendrán una alta insatisfacción al respecto, al igual que en el presente caso.

Gráfico N° 3. Nivel de satisfacción laboral con las condiciones físicas del trabajo de las enfermeras de hospitales públicos y privados de la provincia de Concepción, según las diferentes subescalas del índice de Descripción del Trabajo de Smith et al.
Fuente: Idem Gráfico N° 1.

Otro factor de insatisfacción en ambos grupos de enfermeras son las remuneraciones, sobre las cuales ellas manifiestan claramente su descontento, aunque más marcadamente en las enfermeras de los hospitales públicos, quienes presentan diferencias altamente significativas en este aspecto con las enfermeras de los hospitales privados. Ambos grupos de enfermeras consideran sus remuneraciones malas, injustas y menores de lo que merecen. Parra, S. (2002) y Zúñiga, Y. (2002), Avendaño y col. (1997); y Salvo, C. (1996) encontraron los mismos resultados en los profesionales de enfermería en sus respectivas investigaciones.

En relación a esta problemática, Locke, E. (1976) manifiesta que el dinero es valorado como un símbolo de realización, de reconocimiento, de status o como forma de obtener otros valores, como seguridad o libertad de acción, además de ser un punto de referencia por medio del cual los empleados comparan su valor con otros. Por otra parte, Robbins, S. (1987) señala que las personas desean sistemas de sueldos justos, definidos y acordes a sus expectativas. Cuando el pago se visualiza como justo a partir de las demandas del puesto, el nivel de habilidades individuales, y los niveles de sueldo de la comunidad, es posible que haya satisfacción.

Cabe destacar que en la única subescala que las enfermeras de hospitales públicos logran un mayor nivel de satisfacción que las enfermeras de los hospitales privados, es en la que se refiere al supervisor o jefe. Según la experiencia de la autora, esto se debe a la mayor verticalidad y menor espacio de poder de las enfermeras de los hospitales privados. Krichkaew en Tailandia (1998) encontró que los estilos participativos de dirección o supervisión hacen que las enfermeras tengan un nivel más alto de satisfacción laboral, lo que finalmente llevaría a entregar un servicio más efectivo. Por otra parte Moss & Rowler (1997) también encontraron que el estilo cercano de dirección y el participativo mejoraba la satisfacción laboral de las enfermeras.

En relación al nivel de satisfacción en la vida privada de las enfermeras, se encontró que ellas estaban más satisfechas en este ámbito que en el aspecto laboral.

En cuanto al nivel de satisfacción laboral y su relación con el lugar de opción al momento de la postulación a la carrera de Enfermería, se encontró que cerca del 61% de las enfermeras postuló en primer lugar a la carrera, no encontrándose diferencias significativas en el nivel de satisfacción laboral de estas enfermeras, respecto a aquellas que postularon en segunda o tercera opción. Dado este resultado, se rechazó la segunda hipótesis alternativa de este estudio, que dice que existen diferencias significativas en el nivel de satisfacción laboral de las enfermeras según lugar de postulación a la carrera de Enfermería como primera opción al ingreso a la universidad, de aquellas que postularon en segunda o tercera opción.

Esta investigación es parte de un proyecto mayor sobre satisfacción laboral en Enfermería y que se complementa con otros estudios sobre el tema, tales como los realizados en enfermeras académicas, en servicios de atención prehospitalaria y de atención primaria, en esta región y en otras. Y tiene como finalidad conocer la realidad nacional formulando así un diagnóstico que permita proponer a las autoridades de los distintos centros e instituciones de salud la implementación de programas que ayuden a mejorar u optimizar los factores del trabajo que se identifiquen como influyentes en la satisfacción laboral de las enfermeras de nuestro país, y lograr, así, que éstas trabajen en ambientes laborales más confortables, seguros y agradables, con políticas de remuneraciones y de promociones y ascensos justas y equitativas, todo lo cual influirá en la satisfacción laboral de la enfermera, en su vida personal, en la institución donde laboran y finalmente en el paciente o usuario de la atención de salud.

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

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*Enfermera Magíster en Enfermería mención Salud Comunitaria, Docente Universidad San Sebastián, Concepción, Chile. E-mail: bfernandez@uss.cl

**Enfermera, Profesor guía de tesis, Doctora en Enfermería, Magíster en Enfermería en Salud Comunitaria, Profesor Titular, Universidad de Concepción, Chile. E-mail: tparavic@udec.cl

CALCULANDO LA INEFICIENCIA DE LOS HOSPITALES PUBLICOS




CALCULANDO LA (IN)EFICIENCIA DE LOS HOSPITALES PÚBLICOS
Por: Rodrigo Castro
Director del Programa Social de LyD

La información obtenida a través de la evaluación de la eficiencia de las organizaciones puede ser de utilidad en diversos niveles de la gestión pública. En primer lugar, para mejorar la eficiencia en la gestión identificando las mejores y peores prácticas asociadas con una elevada o reducida eficiencia y productividad y en segundo lugar, para aportar información útil en el diseño de políticas públicas mediante la valoración del efecto de la propiedad, del diseño organizativo, de los sistemas de pago y de otros instrumentos de regulación sobre la eficiencia.

Por ello, Libertad y Desarrollo elaboró un estudio con el objetivo de mostrar evidencia empírica preliminar sobre el desempeño de 54 hospitales públicos en Chile a través del Análisis Envolvente de Datos (DEA).

Los objetivos específicos son:

* Evaluar la eficiencia técnica y de escala de hospitales públicos en sus cuatro niveles.
* Identificar algunos de los factores que posiblemente influyan en la in(eficiencia) de los hospitales.
* Evaluar los cambios en la productividad de los hospitales públicos.

Los resultados sugieren que varios hospitales operan a un nivel de eficiencia muy por debajo de la frontera de mejor práctica que se obtiene a partir de los establecimientos que de acuerdo a su tamaño han demostrado mayor capacidad en el manejo de los recursos. La conclusión fue que sólo un 16% opera eficientemente en comparación a sus pares.

¿ QUÉ TAN EFICIENTES SON LOS HOSPITALES?

Un nivel de eficiencia técnica en el rango de 30,3% a 94,3% indica que una parte significativa de los recursos destinados a salud se desperdician e implica que en promedio los hospitales consumen también entre 30,3% y 94,3% más recursos de lo que es requerido para su nivel de actividad. La descomposición de la ineficiencia total1 en ineficiencia de escala2 y técnica pura se presenta en el Cuadro N° 1.

La magnitud de la ineficiencia técnica pura varia bastante entre los diferentes tipos de hospitales. El tipo 4 presenta un mayor índice mientras que el tipo 1 presenta el menor. Por otro lado, la ineficiencia de escala de los hospitales tipo 3 es bastante menor que el resto, sugiriendo que éstos se encuentran operando relativamente más cerca de la escala óptima que los hospitales de mayor tamaño. Lo anterior también indica que más de un 50% de la ineficiencia técnica total se atribuye a la ineficiencia técnica pura.

Una parte importante de los hospitales nivel 4, 2 y 1 no operan a una escala óptima. Por ejemplo, sólo un 61% de los hospitales nivel 1 y 2 operan a una eficiencia de escala de 0,9 o más. Sin embargo, en el caso de los hospitales de nivel 3 está proporción es de un 100%. Ahora bien, un 38% de los hospitales del nivel 3 presentan un índice de eficiencia total de más de 0,6. Por otro lado, un 43,5% de los hospitales en las otras tres categorías tienen el mismo índice.

Más aún, las estimaciones de eficiencia indican que si los hospitales ineficientes operaran en la "frontera de mejor práctica", el gasto total se podría reducir en US$107 millones. Esto representa un 44% de los requerimientos de recursos adicionales para la implementación del Plan AUGE ( Ver Cuadro N°2).

* Considera sólo aquellos recursos destinados a prestaciones AUGE que son transferidos mediante un esquema de compra por parte del FONASA.


En este sentido, existen cuatro objetivos claves para avanzar hacia una mayor eficiencia:

* Transformar a los hospitales en empresas autónomas del Estado (sociedades anónimas hospitalarias).

* Introducir mecanismos de mercado para mejorar eficiencia y calidad. Gran parte de los problemas financieros que enfrenta el sector público de salud se originan en el inadecuado sistema de incentivos bajo el cual funciona y no en la disponibilidad de recursos públicos, toda vez que éstos prácticamente se han triplicado en términos reales en los últimos doce años. El financiamiento de los prestadores públicos no está orientado a la gestión y los directivos de los establecimientos no son en la práctica responsables de su administración, manteniéndose en sus cargos aunque demuestren incompetencia.

* Poner a los hospitales al servicio de la gente y terminar con la captura de los gremios.

* Generar nuevas fuentes de financiamiento de las inversiones a través de por ejemplo el sistema de concesiones. Considerando este escenario, para lograr eficiencia y calidad en el mediano plazo se necesitan mercados competitivos y personas que puedan optar libremente por el sistema de salud de su preferencia. No es aceptable perpetuar la situación actual donde existe competencia en la administración de los recursos sólo para aquellas personas que están en el sistema ISAPRE, mientras que los beneficiarios del sector público, en su gran mayoría, están cautivos en FONASA.


No obstante los resultados anteriores, esta investigación debe ser extendida en varios ámbitos: mejorar las fuentes de información hospitalaria existentes en el Ministerio de Salud; mejorar las variables de insumo y producto, en particular las variables de producto, de tal forma que se puedan medir aspectos de la calidad y niveles de ocupación de eficiencia en los hospitales; evaluar la influencia de la estructura de mercado en el nivel de eficiencia de cada hospital y estimar el impacto negativo de los actuales mecanismos de pago.

El tamaño del hospital resulta ser otro aspecto directamente relacionado con la eficiencia a escala. En la medida que la inercia presupuestaria premia un mayor gasto y castiga el ahorro (mediante futuros recortes presupuestarios), los incentivos para aumentar gastos con independencia de su calidad y pertinencia, se acrecientan. El sistema de pagos y presupuesto tiene incidencia en la calidad y costos de los servicios. Los establecimientos públicos no compiten para atraer pacientes y no les interesa otorgar más prestaciones, ya que sus ingresos no dependen de lo que realizan. En efecto, tienen clientes cautivos y sumisos, que no pueden exigir sus derechos.

En particular, si se analiza la eficiencia técnica de algunos hospitales públicos de mayor complejidad (tipo 1 y 2) se constata que durante 2002 en el nivel 1, Hospitales como el del Salvador o Las Higueras funcionan con una mejor práctica que sus pares en promedio. Ahora, en ese mismo periodo para los hospitales nivel 2, el Calvo Mackenna y el regional de Copiapó obtendrían el máximo nivel de eficiencia técnica (ver Cuadro N°3).

Es importante tener en cuenta que esta metodología no es una medida de eficiencia absoluta y que la variable de eficiencia sólo refleja el desempeño y tecnología de producción del grupo y por tanto en algunos casos todos los hospitales en términos absolutos pueden resultar ineficientes, pero algunos relativamente más ineficientes que otros. Luego, es probable que con una mayor cantidad de hospitales en la muestra, aumenten los hospitales que se consideran ineficientes.

Finalmente, aunque esta investigación se centra en la medición de eficiencia hospitalaria, debido a la inexistencia de información, no tuvo en cuenta aspectos como la calidad de la atención que reciben los pacientes o la cantidad de servicios que se les presta en las instituciones, aspectos claves en la definición de eficiencia.

Cuadro N° 3

Los hospitales Del Salvador, Las Higueras, Luis Calvo Mackenna, Traumátológico y San José de Casablanca encabezan cada uno en su tipo de hospital el ranking entre los 54 centros de salud del sistema público que comprende el estudio de LyD

1 La ineficiencia se calcula como (1/eficiencia) -1.
2 Eficiencia de Escala mide la capacidad de un hospital de producir en o cerca de la escala (tamaño) más productivo.
3 Aunque se puede suponer que los hospitales operan en una escala óptima y por tanto presentan RCE (Retornos Constantes a Escala), la existencia de imperfecciones en el mercado de la salud e incluso la existencia de restricciones en el mercado financiero, provocan que no todas estas